GESTO

GESTO

Inicialmente no quiero crear ningún discurso. Crear una pintura asemántica, sin significado, mediante la voluntariedad de gestos pictóricos sin orden aparente e improvisados. Muy rápido, pero, en el propio tiempo creativo, las manchas, los signos, emergiendo del fondo y de la espontaneidad del gesto, se configuran con personalidad, como si surgieran de una proto-idea sumergida en mis archivos. El tiempo creativo del cual hablo se acerca más a los deseos de expresar una simultaneidad entre estado de ser, pensamiento balbuce ante y la acción pictórica inmediata. No me quedo aquí.

No acepto, solamente, este primer estadio de manifestación, esta fuerza primigenia. Se inicia, más tarde el trabajo de descubrimiento formal y nace del indiferenciado, la forma identificada, el explícito, que me conectará con mis semblantes, tal vez porque ellos reconocen signos comunes. En resumen, mi psicología busca signos más sociales y culturales, para comunicar con el grupo. De este ejercicio de aproximación nacerán elementos de cohesión, que pueden convertirse en identidades culturales de grupo y consiguientemente en cultura.